EN TODO TÚ
El olvido, ante ti, siente impotencia,
y el tiempo mira el saco vacío de los recuerdos,
porque ninguno reniega del presente.
Formas parte del todo,
de la esencia infinita de las cosas eternas,
de aquello que no puede morir …sencillamente.
Eres como un perfume,
que envuelve mi universo;
y así te aspiro, leve,
cada vez que respiro.
Y así vuelves al Todo,
a través de mi aliento:
Al revivir del agua,
al murmullo del viento,
al retirar solemne
del sol, a su aposento.
Al gesto caprichoso
de la luna, al silencio,
a la verde apariencia
del esplendor campero.
Al silueteo cambiante
de una nube, a los cerros,
a la jara, a las rosas,
al calor, al invierno,
al verso, a la palabra,
al propio sentimiento.
Te vuelves…a mi alma
¡Empapas mis adentros!
Se impacientan mis labios,
te reclama mi cuerpo,
y, cuando no te tengo…
escucho, aspiro, observo,
y me abrazo a la vida…
¡Y en mi vivir, te encuentro!
Hola Francisca, hoy de casualidad, o tal vez no, ya que el destino es caprichoso.
ResponderEliminarHe visto que has publicado y paso a saludarte, leerte y disfrutar de ese bello y profundo sentimiento que siempre regalas para todo aquel que tiene la suerte de leerte.
Hermoso y completo es el amor y que lindamente lo describes en este maravilloso poema.
Un buen fin de semana y un abrazo.
Ambar
Hermosas letras para un amor verdadero, que, todo lo puede, todo lo da. Cariños, nos vemos.
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